Los fosfatos en el agua de la piscina contribuyen a la proliferación de algas, muchos propietarios lo desconocen y a la hora de eliminar las algas de la piscina no lo tienen en cuenta, prolongando el problema e incrementando el gastos en producto químico, en este artículo vamos a ver qué son los fosfatos y cómo los podemos eliminar de la piscina.

Gran parte de la demanda de fosfatos a nivel mundial está destinada a la agricultura porque los fosfatos alimentan a las plantas. Como todos sabemos las algas son un grupo de plantas, por tanto la presencia de fosfatos en el agua de la piscina es un aliciente más para que se multipliquen por el fondo y las paredes.

Otros factores que contribuyen a la proliferación de algas en la piscina son las altas temperaturas, un número insuficiente de horas de filtración, la falta de desinfectante o su escasa eficacia cuando los niveles de pH no son adecuados.

Los fosfatos pueden llegar al agua de la piscina de diversas maneras, ya sea por condiciones atmosféricas como el viento o la lluvia, por el uso de ciertos producto químicos, o bien porque nuestro jardín haya sido «enriquecido» con fosfatos para mejorar el crecimiento del césped o las plantas, o por ejemplo cuando aportamos agua de pozos en cuyos alrededores hay zonas de cultivo.

De dónde vienen los fosfatos

De dónde vienen los fosfatos

Si suele tener algas en la piscina, especialmente si son algas de color amarillo, le recomendamos comprar un kit de análisis que mida la concentración de fosfatos en el agua, si la prueba es positiva puede acudir a nuestra tienda de piscinas ubicada en Fuengirola (Málaga) para conseguir un producto como Phos-Out que neutraliza o elimina los fosfatos del agua.

Cómo eliminar los fosfatos de la piscina

El nivel óptimo de fosfatos debe esta por debajo de 100 ppb, si al realizar el análisis del agua comprobamos que está por encima de este valor es recomendable actuar cuanto antes para eliminar los fosfatos de la piscina, si la concentración de fosfatos es muy elevada quizás le sea más barato tirar toda o parte del agua de la piscina.

Ahora bien, si los niveles están por encima de lo recomendable pero sin ser demasiado altos, será más barato comprar un producto químico específico para neutralizar los fosfatos. El eliminador de fosfatos consigue que se precipiten al fondo, donde son recogidos por el limpiafondos, adicionalmente podemos emplear floculante para ayudar al filtro a retener estas pequeñas partículas, consiguiendo un agua más transparente y de mayor calidad.

Tras reducir su alimento debemos aplicar un tratamiento de choque para acabar con ellas y luego emplear algicida para prevenir la aparición de más algas.