Si tienes una piscina seguro que te encanta contemplar un agua limpia y cristalina, y darte un baño refrescante en ella. Sin embargo, si las algas hacen su aparición esta imagen idílica desaparecerá durante algún tiempo.

Las algas pueden llegar a la piscina de muy diversas maneras, desde una simple lluvia, a cualquier material orgánico, ya sean hojas, tierra, agua de estanques, etc. Pero no te preocupes, con un poco de prevención haremos que sea mucho más difícil la formación de algas.

En primer lugar debemos eliminar todos los residuos de la piscina, el fondo debe estar limpio, así como las cestas del skimmer y de la bomba de agua. Si limpiar el fondo te parece una tarea tediosa, siempre puedes comprar un limpiafondos automático.

Cepilla el fondo y las paredes de la piscina una vez por semana, con esto eliminamos las esporas que se hayan podido adherir a las superficies de la piscina. Debes cepillar desde la línea de flotación, hasta el fondo. Es una tarea sencilla que podría delegar en alguno de tus hijos o en el de algún vecino que quiera usar la piscina de vez en cuando.

Muy importante es mantener los niveles de cloro y pH, sobre todo este último. Ya en artículos anteriores hemos comentado lo importante que es mantener un nivel adecuado de pH para que el desinfectante actúe de manera efectiva.

Con los niveles adecuados nos aseguramos que el desinfectante mata las esporas y previene la aparición de algas en la piscina. Un tratamiento de choque semanal durante los meses de verano o de más uso puede ser ideal para prevenir la aparición de algas.

Igualmente es importante que el filtro funciones al menos 8 horas, o incluso más si hacemos un uso intensivo de la piscina o el clima es muy caluroso. El agua templada es un caldo de cultivo para la algas, así que mucho cuidado.

Por último, debemos analizar el agua de forma regular, de hecho no es mala idea llevar a analizar el agua de la piscina una vez al mes, los profesionales cuentan con equipos más complejos que permiten realizar un análisis en profundidad para detectar problemas con el pH, la alcalinidad del agua, la dureza del calcio, y otros parámetros que pueden afectar al agua de la piscina.

El mantener un contacto habitual con profesionales de la piscina le puede ayudar a aprender sobre el mantenimiento de la misma, así como ayuda a realizar un seguimiento que evite problemas como la aparición de algas en la piscina.

Si resides en Málaga puedes contar con el asesoramiento de Piscinas CODE, un equipo de profesionales que llevan más de 40 años dedicados al mundo de la piscina y que seguro podrán acabar con las algas de la piscina.